[smartslider3 slider="2"] El Semáforo Inteligente – AFAE
septiembre 21, 2018

El Semáforo Inteligente

El proyecto familias inteligentes

Educar es pasar de ser imprescindibles a ser prescindibles. Es una frase que a Ortuño le gusta plantear a las madres y padres en los cursos y terapias.

Cuando un bebé nace, no sabe tomar decisiones, depende en exclusiva de sus cuidadores. Pero tiene una poderosa maquinaria para madurar y crecer, para que tarde o temprano decisiones que tomamos por ellas y ellos,  las tomen de forma autónoma.  Al principio con nuestra ayuda, luego con nuestro acompañamiento.

Familias inteligentes es un proyecto que ayuda a padres y a madres a ejercer con buenas prácticas su labor educativa, adaptándose al desarrollo evolutivo de las hijas e hijos, sin recurrir a regañinas castigos, sermones ni chantajes, construyendo con eficiencia un apego seguro apoyado en dos pilares:

  •     El apoyo incondicional: la niña o niño, se tiene que sentir querida y querido siempre, haga lo que haga. Ha de apreciar que sus padres están disponibles en el momento que lo precise, que son accesibles y sensibles ante sus necesidades. Si se siente aceptado y amado, se siente seguro, y querrá crecer, madurar, responsabilizarse.
  •     El control respetuoso: que ayude a construir de forma progresiva su autonomía. Decidiendo lo que puede decidir, estableciendo límites de forma inteligente y empática, dejando hacer, con confianza y respeto, con coherencia y credibilidad.

El proceso de crianza y la toma de decisiones, ineludiblemente, van de la mano. Y decidir es potenciar la inteligencia (inteligencia viene de elegir entre). Se puede definir la inteligencia como la capacidad de utilizar de forma adecuada la información que se tiene procesada para resolver una determinada situación y poder adaptarse a los cambios, a la novedad.

La educación consiste entre otras cosas, en lograr que nuestras hijas e hijos sean inteligentes, es decir, sepan tomar decisiones, anticiparse, resolver los problemas que afectan a su bienestar, adaptarse a realidad que se van a encontrar. Eso es lo que pretende Familias inteligentes.

¿Qué herramienta utilizamos?

El Semáforo Inteligente, una técnica útil y eficiente que ayuda a manejar (y a prevenir) los conflictos habituales de la crianza. Una técnica que se centra en el entrenamiento de tres grandes habilidades:

  • Decir NO
  • Negociar
  • Traspasar responsabilidades

Las familias deben aprender a diferenciar tres situaciones, tres zonas que siempre coexisten en cualquier escenario educativo, y que coinciden con los tres colores del semáforo:

 

ZONA 1: el control de la situación lo posee la persona adulta, que debe asumir la responsabilidad para proteger a sus criaturas. La hija e hijo todavía no puede afrontar esa realidad, no tiene habilidades para decidir. Es el espacio donde se ejerce una autoridad de forma empática, es decir, teniendo en cuenta la postura y la opinión del otro. Son situaciones donde no cabe la negociación. Es un NO. Es el semáforo rojo.

ZONA 2: el control de la situación se puede y debe compartir.La hija e hijo ya puede ser protagonista, ya tiene recursos para participar y decidir, ya puede asumir responsabilidades. Tanto el adulto como el menor pueden tomar decisiones, pueden negociar. Es una situación donde se establecen conjuntamente compromisos con ellas y ellos, y se confía y respeta su toma de decisiones, sin buscar la obediencia ni usar castigos. Es el semáforo amarillo.

ZONA 3: el control de la situación y la responsabilidad es totalmente de la hija e hijo. Toma decisiones que afectan a su proyecto de vida, no a la de sus padres. Los progenitores aprenden a acompañar, a estar disponibles cuando la hija o hijo lo crea conveniente, a mostrar plena confianza cuando tienen que decidir y, muy importante, la hija o hijo debe y tiene que percibir que se respetan sus decisiones. Es el semáforo verde.

En resumen, el semáforo inteligente es una técnica que ayuda a nuestras hijas e hijos a:

  • anticipar
  • organizarse
  • planificar
  • controlar sus emociones y conductas
  • asumir responsabilidades
  • marcarse metas y objetivos
  • ser autónomos
  • motivarse
  • tomar sus propias decisiones.

Para ello es necesario que seamos personas cariñosas, respetuosas, flexibles y segura